La industria de la construcción es un engranaje de personas, profesiones e ideas que investiga, trata y transforma materias pimas para restaurar, crear y construir.

La investigación, el desarrollo y la innovación están muy presentes en esta industria, ya que estos conceptos según en qué disciplina o contexto, sriven para diseñar productos a corta vida, pero en la consrtrucción persiguen la permanencia, la durabilidad y la seguridad.

Las nuevas técnicas se utilizan para estudiar la resistencia de hormigón, calcular estructuras, elegir materiales adecuados para apaliar los efectos climáticos sin olvidarse nunca de la comodidad familiar y social.

La esencia de un proyecto de construcción debe responder a una necesidad social, ya sea de tipo personal o colectivo. Por ejemplo, para que la sociedad disfrute de la educación académica se necesitan edificios que permitan recibir e impartir las clases y caminos para llegar a ellos.

Esta industria aglutina el conjunto de profesionales que los idea, inicia, desarrolla y finaliza. Esquipos multidisciplinares que entran en distintas fases y en todas trabajan de forma coordinada.

1. Planificación del proyecto.

El primer paso es calcular costes y marcar presupuestos para que los profesionales de ingeniería y arquitectura diseñan espacios, volúmenes, calculen estructuras y elijan materiales.

Las características constructivas deben responder a las necesidades del usuario final y quedar bien reflejadas en los panos arquitectónicos, estructural y de instalaciones. También se debe elaborar un plan con seguimiento permanente que garantice los niveles de seguridad, salud laboral, calidad y cuidado medioambiental. Todas las partes implicadas deben respetar con rigurosidad estos procesos.

2. Instalaciones preliminares.

Cuando comienza el trabajo a pie de obra, arranca con los montajes efímeros para proteger el terreno intervenido de las áreas públicas y abastecer de espacios a los trabajadores. Las máquinas van adquiriendo protagonismo que junto a las herramientas manuales estarán peresentes en todo el proyecto guiadas y utilizadas por operarios especializados.

3. Preparación del terreno.

Su primer cometido será preparar el terreno, limpiarlo, corregir desniveles y realizar las excavaciones que permitan plantear la cimentación, saneamiento y construcción de muros de contención. Aquí se inicial la actividad transversal del reciclaje. Mientras se realizan estas labores, diversas empresas producen lo necesario tanto por los cimientos como para toda la estructura. El transporte será imprescindible para el traslado de materiales.

4. Estructura del edificio.

Finalizados los cimientos se inicial la estructura. Encofrago, hormigonado, colocación de pilares, forjados, losas de escaleras, conductos internos, etc. Montacargas y grúas facilitan la elevación y movimientos de elementos pesados. Los equipos de trabajo constinúan aumentando.

5. Cierre de estructura.

Después de montar la estructura general, se cubre con los materiales necesarios. Se levantan muros, fachada, tabiquería de ladrillo, impermeabilización y aislamientos. 

Los entramados de las instalaciones hidráuliza, térmica, eléctrica, telecomunicación, energía o detección contra incendios quederán ocultos con los acabados interiores.

6. Acabados interiores e instalaciones finales.

Estos comenzarán a embellecer el inmueble y darán paso a las instalaciones finales.

7. Urbanización del edificio.

En los aledaños de la construcción profesionales pisajistas utilizarán su creatividad y se valdrán de mobiliario urbano, pavimientos y vegetales para la total urbanicación de proyecto.

Equipado, cuidado y finalizado tanto interior como exterior, el centro escolar ya podría ser utilizado y habitado. Cientos de personas con profesiones diversas se pueden sentir orgullosas de haber trabajado para materializar este espacio que albergará el tuturo de nuestra sociedad.

Está claro que la industria de la construcción es un motor que todo lo mueve. Sin embargo, cualquier bien incluso los más básicos, sino se utilizan de forma coherente producen desequilibrios y hasta pobreza.

Es necesario entrar en una nueva era, qie sólo dé cabida a la profesionalidad en la que se pueda conocer con claridad lo imprescindible que esta industria ha sido, es y será en el desarrollo de cualquier sociedad.

Reconocer la labor de los buenos empresarios y el esfuerzo, la habilidad, la maestría individual de los profesionales de la construcción, personas que aspiran a continuar con su trabajo eficiente de generar valor añadido, vertebrar territorios, facilitar vías de comunicación y crear continentes para disfrute personal, laboral, social o lúdico facilitando así nuestro desarrollo vital.